Manuel Cabieses en su editorial de Punto Final
Han transcurrido 43 años desde la muerte del presidente Salvador Allende en La Moneda bombardeada y en llamas. Tiempo más que suficiente para apreciar en toda su magnitud la tragedia que desató en Chile la traición de las fuerzas armadas en cumplimiento de su tradicional papel de escuderos de la oligarquía. El recuerdo de ese hecho histórico se hace especialmente necesario en la crisis que hoy vive el país y cuyo principal ingrediente es precisamente el factor ético. Inspirarse en la lección de Allende de lealtad a los principios en esa hora suprema, ayudará a la futura Izquierda chilena a recomponer el ideario que permite las grandes hazañas de los pueblos.
La lección de Allende -rubricada por el heroísmo de enfrentar el golpe militar con un puñado de valerosos combatientes- ha sido relegada al olvido por muchos que se proclamaban sus “seguidores” y “herederos”. La Izquierda institucionalizada desempolva cada tanto el recuerdo de Allende para cumplir un rito que se hace cada vez más formal. Se sacraliza su nombre, convertido en icono inofensivo despojado de todo filo revolucionario. En la conducta de esa falsa Izquierda no se rescatan los valores éticos y políticos por los que combatió Allende. El ejemplo más bochornoso lo constituye su propio partido, que hace tiempo abandonó la ideología y los principios originales del PS para hacer suyas las banderas del neoliberalismo. (Texto completo en: http://www.puntofinal.cl/ )
MANUEL CABIESES DONOSO
Abstract de la nota editorial de “Punto Final”, edición Nº 859, 2 de septiembre 2016.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Expresa tu comentario: